Así es Mercatitlense.

Con una historia más romántica que “El Crepúsculo”.

Con más altibajos que Brad y Angelina.

Con más tensión sexual que Justin Bieber con sus fans.

Llega nuestro triángulo amoroso más querido.

Las cookies, Google y Facebook

Las cookies y el marketing digital siempre han tenido una relación candente.

No por nada el primer blogpost de Mercatitlán fue acerca de las cookies allá en 2016.

(Léelo solo para que veas cuánto ha mejorado el blog)

Las cookies ayudan a los anunciantes a darles anuncios más relevantes a los usuarios.

Y aunque a los usuarios muchas veces les parece terrible que después de haber visitado una página de viajes les aparezcan anuncios de viajes, a mi me parece genial.

La realidad es que los anuncios van a aparecer quieran los usuarios o no.

Entonces…ya si van a aparecer, que al menos sean de productos y servicios que te interesan, no?

¿Cómo funciona esta historia de amor entre las cookies, Google y Facebook?

Es bastante sencillo…la netflix.

Cuando cualquier persona hace clic en un anuncio de Facebook o Google, estos le plantan una cookie en su navegador.

La cookie realmente no es una galleta de chispas de chocolate (lo sé, a mi también me dolió).

Es un archivo de texto muy pequeño que contiene un identificador único.

Entonces, si alguien entra a Google y busca “quiero comprar una televisión” y hace clic en el primer anuncio, Google inmediatamente le guarda este archivo de texto y dentro de él su identificador único.

Supongamos que para este caso el identificador es JL786.

Este usuario entra al sitio para comprar teles pero justo le llaman por teléfono, se levanta de su lugar y no compra nada.

5 horas después, se acuerda que tenía que comprar una tele pero ya cerró la pestaña.

Se aprendió el dominio del sitio web, entra directamente y compra su tele.

Al comprar, Google lee las cookies que tiene el usuario y se da cuenta que tiene una con el identificador JL786.

Así es como Google sabe que un usuario que hizo clic en un anuncio terminó comprando el producto.

Y exactamente lo mismo sucede con Facebook.

¡Pero espera, aún hay más!

Siempre que hablo de cookies me preguntan estas dos cosas, así que mejor de una vez se las respondo…

¿Cuánto dura una cookie?

Al crearla, tú puedes configurar la duración.

Pero realmente su duración es ilimitada ya que son un archivo de texto.

Es como preguntar cuánto dura un Word.

¿Qué pasa si cambio de dispositivo?

Esta es buenísima pregunta.

Pero la respuesta es…nada.

Aunque claro, la cookie en si está guardada en un dispositivo específico, lo que hace Google y Facebook es increíble.

Ellos asignan esa cookie “JL786" a tu usuario de Google o Facebook.

Entonces si entras desde tu compu a Facebook, haces clic en un anuncio y luego entras desde tu cel (en donde tienes también una sesión en Facebook) saben que eres el mismo.

Las cookies son amigas, no comida.

cookies, Google y Facebook

A menos que te refieras a las de chispas de chocolate, entonces olvida lo que dije.

Estos pequeños archivitos de texto ayudan a los anunciantes a ser más eficientes, a los usuarios a recibir mejores anuncios y a Google y Facebook a fortalecer su triángulo amoroso.

Por eso es importante que sepas cómo funcionan.

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